Adicción


Bebiendo la
tinta por los ojos
desnudas mis argumentos,
desmenuzas todo lo que te digo
en el papiro eterno;
compartes tu adicción con cientos
que juegan a contratiempo
y le echas la culpa
al jazz que se escucha
desde el viejo café
que otrora frecuentaras.
No te queda más remedio que terminar
y buscar en algun barco
otro shot de tu alivio.

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