Dorado mar

Infinitas vías lácteas
en el vaivén del Tiempo
mientras una música llena de miel
nos deja dorados.
Cuando ese oro flota hacia la eternidad,
recuerdo las tardes de Ítaca
en las que me bañabas de ti,
planeando en el cielo acuoso.

Mi caña flotando alrededor de mi,
girando y yo hilando,
tejiendo los sueños
que olvidamos...

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